Era débil
y pequeña
y luchaba contra mí misma
y contra el que manejaba mi cuerpo de marioneta.
Tú me quisiste sin conocerme.
Me llevaste a ver películas y a comer dulces.
Ahora soy pequeña
(todavía soy débil)
y ya me he cansado de luchar.
Tú sigues queriéndome a pesar de conocerme.
Y haces de mi vida una película
con fotografía de cocina, leche y galletas.
(Lástima que no sepas
que tú eres el director)
viernes, febrero 11, 2005
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario